Esta mujeraza, abogada y mamá de 4 chicos divinos, tiene mucho que aportar al blog. Soy testigo de que ha hecho viajes increíbles con su familia, y su gran compañero de vida Fer…Ambos tienen mucho para enseñar a los padres primerizos, y a quienes sienten ganas de viajar, pero se acobardan un poco excusándose en que con chicos es más difícil. Raque, la tiene clara y se manda sin problemas a la hora de hacer las valijas x 6…Su destino se cruzó con el de Fer en Lake Tahoe, Estados Unidos durante un “work & travel” en 2004…Se sintieron tan bien juntos que extendieron el viaje unos meses más…,y se fueron a Europa a seguir recorriendo. «Nos casamos en 2005 y a partir del 2006 llegaron Juana (11), Delfi (9), Santi (8) y Sol (5). Nunca dejamos de viajar. La pasión por la aventura y la libertad de explorar el mundo, ligeros de equipaje nos acompaña desde siempre y la transmitimos a los chicos».
RAQUE CUENTA SU VIAJE A MATADEIRO
DESTINO Teníamos ganas de ir a Brasil que nos atrae por la onda de sus playas y su gente. Su ambiente relajado, su clima alegre y tropical. Unos amigos nos recomendaron Matadeiro, al sudeste de la isla de Santa Catarina, a 30 km de Florianópolis. Una playa agreste y tranquila, de pocas casas (un puñado sobre la playa y otro arriba del morro) y nada más, a la que se accede caminando porque es Reserva Natural y no se ingresa con auto. Reservé con tiempo -en septiembre- una casa para la primer quincena de febrero. Un mar apto para niños y agua trasparente nos habían terminado de convencer.
EL VIAJE El 31 de enero cargamos el auto: tablas de surf/ stand up paddle al techo (√), bártulos varios al baúl (√), matera pronta para encarar el viaje (√), sándwiches para la primer parada (√), música y pelis en algún dispositivo para los momentos críticos (√), todos arriba y atados (√). Partimos rumbo a Floripa!!! Ya en la ruta, (www.ruta0.com mediante), decidimos ir vía Uruguay, (es el camino más corto aunque un tramo está en arreglo y es de ripio) pasando por los pasos fronterizos de Colón – Paysandú y Rivera – Santana do Livramento.
Son 1700 km desde Buenos Aires, que hicimos en dos tramos, 10 hs. por día, parando a dormir a mitad de camino en Sao Gabriel. Paramos en el Hotel San Isidro, ubicado sobre la ruta con unos toboganes de agua gigantes que invitan a quedarse, y había lugar!! Del auto directo a la pileta a descargar energías comimos y a dormir. Al día siguiente un desayuno y a la ruta. Desde Porto Alegre a Floria es todo autopista (la 290 y la 101). Tuvimos algo de tráfico para entrar a la isla y a la tarde llegamos a Armacao, el pueblo más cerca de Matadeiro donde se deja el auto para seguir a pata. Dejamos el auto en la cuadra de la comisaría, como nos recomendaron. Nos cargamos al hombro las cosas y caminamos hasta Praia do Matadeiro!!! Todavía nos quedaba atravesar la playa por la arena, hasta la otra punta donde esperaba la cabaña, que finalizada la travesía de media hora, nos recibió con la puertas abiertas y hamacas paraguayas en la galería. A la noche dormimos felices con el sonido de las olas en nuestro refugio de madera que balconeaba sobre el mar. Esa primera noche el lugar nos cautivó.
MATADEIRO Estar cerca del mar con 4 chicos fanáticos del agua es ideal y es importante encontrar un rincón de playa poco concurrido para no perderlos de vista!!..Además Matadeiro cuenta con un puesto de guardavidas y 3 bares sobre la playa (abiertos de día), con música brasileña en vivo, donde comer una porción de lulas o camaraos acompañados de una cerveza helada, o caipirinha, y una mousse de maracuya. E infaltables los vendedores ambulantes de delicias irresistibles como el “milho quenchi”, las “castañas de cajú”, el “queijo asado” o las originales “Zungas Amor” que son hit en Matadeiro, y la prenda obligada de grandes y chicos.
HOSPEDAJE La estadía en la casa que alquilamos transcurrió en la galería, con una vista increíble a la playa, donde desayunamos, almorzamos, leímos, tomamos mate y comimos cada noche. El resto del día bajamos a la playa y los chicos se lo pasaron en el mar: remando, surfeando y buceando sin parar. Día por medio cuando bajaba el sol cruzábamos a Armacao a hacer compras y llevar la basura. Y si se hacía tarde nos quedábamos a comer unas pizzas o hamburguesas por ahí… Sólo un día nos subimos al auto para ir a comprar peixe a Pántano du Sul, un puebo de pescadores muy pintoresco que está cerca y conocimos la playa de Azores.
Hay cangrejos de todos los colores y tamaños, peces, pulpos, lagartos y lagartijas, monos, cuatíes, tortugas de mar y delfines!!!
TOURS Y EXPERIENCIAS
Imperdible: “Trilha do Matadeiro – Lagoinha do Leste” Caminata de 2 horas por un sendero que atraviesa el morro hasta llegar a la paradisíaca playa de Lagoinha del Este: una extensa playa virgen, de arena clara, mar turquesa y una laguna de agua cálida (los chicos que se quedaron nadando horas allí). Naturaleza salvaje en su máxima expresión sorprende y maravilla a cada paso. Nos cruzamos con flores silvestres de colores vivos, vistas panorámicas desde lo alto, y cascadas de agua fresca donde hacer una pausa y mojarse. Indispensable para esta excursión: una buena dosis de repelente contra mosquitos y un par de zapatillas cómodas (nada de ojotas!). Volvimos en un barquito hasta Armacao.
“PROJETO GOLFINHOS”: Fue lindo que los chicos pudieran participar de un curso sobre “Concientización ambiental y prevención sobre los peligros del mar” -abierto a niños menores de 12 y a cargo de los Guardavidas con simulacro de rescate en mar abierto y entrega de diplomas incluidos. No se perdieron una sola clase!! (Eso que arrancaba a las 8am). Lo disfrutaron y aprendieron un montón, además de hacer amigos!!
CARNAVAL CARIOCA: A la semana siguiente fue el Carnaval y nos cruzamos una noche a Aramacao donde habían armado un escenario con música en vivo y bailamos en la calle en un ambiente muy festivo y familiar, mientras los chicos se divertían con espuma en aerosol.